jueves, 21 de abril de 2011
FLORA NATIVA EN EL PAISAJISMO
EL DÍA 14 DE ABRIL EN LA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE VALPARAÍSO TUVE QUE PARTICIPAR CON UNA PONENCIA SOBRE LA FLORA NATIVA EN EL PAISAJISMO, DENTRO DEL MARCO DEL CONGRESO DE FLORA NATIVA QUE DESARROLLÓ ESA UNIVERSIDAD.
Como parte del directorio del Club de Jardines de Chile quise, mediante un power point, sumarme al continuo interés que hemos manifestado por años en esta temática, y en la meta de darla a conocer constantemente.
Son varias las interrogantes a responder para llegar a establecer el verdadero interés por incluirla en los proyectos paisajísticos, tanto de parques y avenidas, como de jardines privados.
Han existido a lo largo de la historia de nuestro país diversas formas relacionadas con la difusión de la flora nativa y la internalización de los conocimientos de ella, su protección y multiplicación. Han sido muchos los estudios que realizan los centros de investigación y los esfuerzos por lograr áreas protegidas y la legislación que ampare a estos lugares en riesgo.
Lo que presentamos pretende motivar el conocimiento y uso de nuestra flora y mostrar cómo puede lucirse en el paisaje recreado. Mostramos una revisión de lo que ha sido en la historia de nuestro país este largo caminar por valorar nuestra flora y a la vez distintos jardines relacionados con el cultivo y establecimiento de especies nativas.
Quisimos mostrar en "Flora Nativa en el Paisajismo" cómo los diferentes profesionales de este país han tomado conciencia de su valor; cómo lentamente los municipios, entidades constructoras y de mantención de áreas verdes han ido incorporándola en calles, bandejones centrales, nudos viales, orillas de caminos...
También hicimos un catastro entre diferentes paisajistas para mostrar cómo hubo en ellas un cambio en su mentalidad, para dejar de lado los prejuicios de que la flora nativa tenía un lento crecimiento, que era poco colorida, y que sólo sus árboles valían la pena, pero al ser mayoritariamente de hoja persistente tenían el inconveniente de no poder usarse en cualquier lugar.
Las posibilidades son muchas. Esto no es solamente una moda. Los hermosos juegos de colores, texturas y formas de nuestros bulbos, herbáceas, arbustos y árboles pueden combinarse perfectamente con las especies introducidas y formar una amalgama perfecta.
Esto permitirá que los jardines chilenos tengan un sello especial, diferente, único, que los idientificará frente al de otros lugares, porque las especies empleadas serán propias de nuestro país. Será la flora nativa. La flora de Chile.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Recordé algo que decía un grande del diseño paisajístico y la arquitectura del paisaje: Burle Marx. Los jardines deben tener identidad. Un profesional del paisajismo no puede hacer los jardines igual a como los haría un francés, un inglés, o cualquiera de Brasil. Debe descubrirse el "genio del lugar", lo que ese espacio nos habla, destacando las especies que existen en ese entorno o reflejando la presencia que tienen.
ResponderEliminarEs por eso que los jardines de Burle Marx tienen algo especial, un exotismo muy propio, irrepetible.
En Chile nuestra identidad obviamente será diferente, ya sea un jardín o un parque que responda a las necesidades climáticas y geográficas del norte, centro o del sur del país. Ya esté ubicado en la costa, en los valles o junto a la cordillera.
Esa riqueza permite hacer aún más interesantes nuestros espacios, los que combinados con nuestra flora endémica serán además sustentables y acordes con la mentalidad actual que tiende a cuidar el planeta.
"Debes poder hacer tu jardin con lo que encuentras al alcance de tu mano."
ResponderEliminarSi fuéramos capaces de respetar esta máxima china, el "genio del lugar" de Burle Marx aparecería solo. Nos sorprendería. Nos descubriría él a nosotros (y no al reves)con gesto extaciado.
Lo intento desde mi mas tierna juventud, a veces creí conseguirlo...